El pasado sábado 27 de octubre la Orquesta Sinfónica de La Paz colgó el cartel de “No hay Entradas” en l’Auditori de la Mediterrània de La Nucía. En este concierto “Romantic Mistery” la orquesta estuvo acompañada por el prestigioso pianista húngaro Isaac István Székely. Se trataba del décimo quinto lleno absoluto de l’Auditori en 2018, completando las 600 butacas de la sala. El público despidió a la  Orquesta Sinfónica de La Paz con una gran ovación, puesto en pie.

Este concierto  “Romantic Mistery” fue organizado por la concejalía de Cultura del Ayuntamiento de La Nucía con la colaboración del Área de Cultura de la Diputación de Alicante, dentro de su programa “La Diputación es cultura, la Diputación Es música”. Se trataba del estreno de este programa, que se repetirá el próximo 31 de octubre en Sant Joan. Por tanto el público de l’Auditori de La Nucía fue el primero en disfrutarlo.

Ovaciones y aplausos
La Orquesta Sinfónica de La Paz llenó de público y música l’Auditori de La Nucía. La comunión con el público fue perfecta desde el primer compás del concierto. El respetable dedicó varias ovaciones a la orquesta y a su director Joan Espinosa, durante la actuación. Al finalizar el concierto se puso en pie para dedicar una larga ovación que hizo que la Orquesta Sinfónica de la Paz y el virtuoso pianista Isaac István Székely repitieran casi al completo la “Danse Macabre S.126 para piano y orquesta” de Franz Liszt. 
Tras el bis final el público volvió a repetir un caluroso aplauso, para reconocer el gran concierto ofrecido por la  Orquesta Sinfónica de La Paz y el pianista Isaac István Székely, bajo la batuta de Joan Espinosa.

Completo programa
El público de l’Auditori de La Nucía disfrutó en este concierto “Romantic Mistery” de un completo programa con las siguientes piezas:  “Peer Gynt Suite nº1” de E. Grieg, “Vals triste op 44 nº1” de J. Sibelius, “Elegía para violonchelo y orquesta” de G. Fauré con el solista Francisco Pastor, “Pavana para una infanta difunta” de M. Ravel,  “Danza Macabra” de C. Saint-Saens y “Danse macabre  S. 126 para piano y orquesta” de Franz Liszt. Una pieza de 15 minutos, de gran dificultad técnica y muy exigente para los músicos. Un concierto con entrada gratuita, para acercar la música clásica y de orquesta a “toda la sociedad”.